EL HERALDO
Ciudad de México.- Este no es el momento para complacencias, aun cuando en los últimos días se presentaron progresos importantes en la economía de Estados Unidos, además de acuerdos para resolver los problemas de deuda en Europa, coincidieron en señalar Agustín Carstens, gobernador del Banco de México, y José Antonio Meade Kuribreña, secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
En conferencia de prensa con motivo de las conclusiones sobre la Reunión de ministros de finanzas y banqueros centrales del G-20, los funcionarios precisaron que esperarán a la reunión de primavera, en marzo del Fondo Monetario Internacional (FMI), para decidir sobre el incremento a las cuotas del organismo financiero internacional.
Al respecto, Agustín Carstens manifestó que el próximo mes las naciones de la eurozona evaluarán la fortaleza de sus instituciones y el apoyo financiero que necesiten.
Entonces dijo, será vital la decisión que tome el G-20 para canalizar recursos al Fondo Monetario Internacional, además que deberá hacerse rápido.
Por su parte, José Antonio Meade descartó que se haya cambiado el rumbo sobre la ayuda al organismo internacional, más bien, aclaró, en marzo se revisarán los adelantos que hayan registrado.
Añadió que se ha atenuado y conjurado un episodio de crisis, ello a pesar de los avances que se registraron en política económica.
El funcionario resaltó que es necesaria una agenda en donde se corrijan y desahoguen los problemas.
Sobre el G-20 estableció que se ha trabajado para construir instrumentos que permitan identificar desbalances además que se han establecido medidas para corregirlos, con ello, dijo, "se logró detener la volatilidad en los mercados financieros internacionales".
En conferencia de prensa con motivo de las conclusiones sobre la Reunión de ministros de finanzas y banqueros centrales del G-20, los funcionarios precisaron que esperarán a la reunión de primavera, en marzo del Fondo Monetario Internacional (FMI), para decidir sobre el incremento a las cuotas del organismo financiero internacional.
Al respecto, Agustín Carstens manifestó que el próximo mes las naciones de la eurozona evaluarán la fortaleza de sus instituciones y el apoyo financiero que necesiten.
Entonces dijo, será vital la decisión que tome el G-20 para canalizar recursos al Fondo Monetario Internacional, además que deberá hacerse rápido.
Por su parte, José Antonio Meade descartó que se haya cambiado el rumbo sobre la ayuda al organismo internacional, más bien, aclaró, en marzo se revisarán los adelantos que hayan registrado.
Añadió que se ha atenuado y conjurado un episodio de crisis, ello a pesar de los avances que se registraron en política económica.
El funcionario resaltó que es necesaria una agenda en donde se corrijan y desahoguen los problemas.
Sobre el G-20 estableció que se ha trabajado para construir instrumentos que permitan identificar desbalances además que se han establecido medidas para corregirlos, con ello, dijo, "se logró detener la volatilidad en los mercados financieros internacionales".
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